Conducir en la vejez: Retos y soluciones para los conductores mayores
Conducir en la actualidad puede ser un desafío abrumador para cualquier persona, especialmente para aquellos que enfrentan las realidades del envejecimiento.
A medida que nuestra población envejece, se espera que el número de conductores mayores en las carreteras de Canadá aumente significativamente. Actualmente, alrededor del 70 por ciento de los canadienses de 55 años en adelante tienen licencia de conducir. En Ontario, los conductores mayores de 80 años son el segmento de mayor crecimiento de la población de conductores. A lo largo de los años, las muertes en carretera han disminuido significativamente en todos los grupos de edad, excepto en los conductores de 65 años en adelante. Según los kilómetros conducidos, los conductores maduros tienen más colisiones que cualquier otro grupo de edad.
Desafíos y soluciones para los conductores mayores
Mientras que las trágicas historias de colisiones de tráfico que involucran a personas mayores a veces generan llamados a límites de edad específicos para las licencias de conducir, una solución más realista y práctica radica en mejorar la educación vial y la aptitud para conducir.
"No hay una edad específica después de la cual las personas ya no puedan conducir", dice Jack Smith, presidente del Consejo de Seguridad de Canadá. "Pero la realidad es que el envejecimiento trae nuevos desafíos físicos y mentales para los conductores. Reconocer estos desafíos y aprender a compensarlos es clave para la educación de los conductores maduros".
Algunos de los desafíos relacionados con la edad que enfrentan los conductores incluyen la visión reducida (especialmente de noche), los reflejos más lentos y una disminución en la percepción de la profundidad. Muchos adultos mayores también toman medicamentos para diversas dolencias, algunos de los cuales pueden afectar su capacidad para conducir. Otro factor es la demencia: un estudio de 2004 estimó que solo en Ontario habrá casi 100,000 conductores con demencia en la carretera para 2028. Los investigadores de la Universidad de Ottawa que realizaron el estudio ahora están trabajando para desarrollar un método para que los médicos identifiquen a los adultos mayores que no son aptos médicamente para conducir.
La importancia de la educación vial para los conductores maduros
El curso de actualización para conductores "55 Alive" del Consejo de Seguridad de Canadá ayuda a los conductores maduros a mejorar y actualizar sus habilidades, brindándoles herramientas para mantenerse seguros en la carretera. El curso enseña técnicas prácticas de conducción defensiva, reducir la velocidad, conducir durante el día y reducir la duración de los viajes, todas las cuales pueden ayudar a mitigar los desafíos relacionados con la edad y mantener a los conductores maduros más seguros.
"'55 Alive' ayuda a los canadienses maduros a mantener su independencia", agrega Smith. "Tener la confianza y las habilidades para conducir de manera segura hacia donde necesiten ir puede mejorar en gran medida la calidad de vida para muchos adultos mayores".
Aunque la independencia es importante para todos, debemos enfrentar el hecho de que algún día ya no podremos conducir. A medida que muchos baby boomers ven a sus padres lidiar con el envejecimiento, surgen algunas preguntas difíciles: ¿Cómo sé cuándo mamá y papá ya no pueden conducir? ¿Cómo se lo digo?
"El curso '55 Alive' puede ser una buena manera para que las familias aborden este tema delicado con los conductores maduros", dice Smith. "Parte del curso los ayuda a prepararse para el día en que ya no puedan conducir, ayudándolos a aprender a hacer arreglos de transporte alternativos y adaptarse al cambio de estilo de vida".