El peligro del metanol: síntomas y efectos
Síntomas de intoxicación por metanol:
- Molestias estomacales
- Mareos
- Problemas de visión
El metanol es un solvente industrial ampliamente utilizado que también se encuentra en algunos productos químicos domésticos. Es un líquido incoloro y transparente con un olor suave similar al alcohol. También se le conoce como alcohol metílico, metil hidrato, carbinol, alcohol de madera o espíritu de madera.
El metanol se utiliza como solvente en lacas, pinturas, barnices, cementos, tintas, tintes, plásticos y diversos recubrimientos industriales. También se utiliza en la producción de productos farmacéuticos, formaldehído y otros productos químicos. Aparece como ingrediente en muchos productos, desde solventes industriales hasta líquido limpiaparabrisas y quitaesmalte. Además, se utiliza como combustible.
La inhalación de vapores de metanol es la ruta más común de exposición ocupacional. También puede producirse intoxicaciones por absorción a través de la piel, aunque es solo un irritante leve para la piel, puede ser absorbido en cantidades tóxicas. También es posible su ingestión accidental.
El metanol tiene un sabor y olor similar al alcohol común (etanol) y ha sido utilizado como sustituto en bebidas alcohólicas ilegales. En marzo de 1997, tres personas murieron en el norte de Ontario como resultado de la intoxicación por metanol causada por un lote de aguardiente de mala calidad.
Efectos de la intoxicación por metanol
Ingerir tan solo cuatro mililitros de metanol puede causar ceguera y entre 80 y 150 mililitros pueden ser mortales. Una cantidad letal es aproximadamente media mililitro por kilogramo de peso.
Beber metanol causa efectos similares a los del alcohol común, como molestias estomacales y mareos, pero con la adición de problemas de visión pronunciados. Después de que estos efectos desaparecen, vuelven a aparecer de seis a 30 horas después, pero con mucha mayor gravedad. Los síntomas graves suelen aparecer de 18 a 24 horas después del consumo. El tiempo de recaída hace que sea imperativo buscar ayuda médica lo antes posible.
Los más gravemente intoxicados pierden el conocimiento y mueren de insuficiencia respiratoria o cardíaca. Los que no mueren pueden quedar en coma durante hasta una semana y pueden quedar ciegos.
La ingestión accidental de metanol no es probable en el lugar de trabajo. En caso de que ocurra, se debe buscar ayuda médica de inmediato. Nunca intente hacer vomitar a la persona afectada, pero si eso ocurre, mantenga a la persona inclinada hacia adelante para reducir el riesgo de que el metanol sea aspirado hacia los pulmones. Se puede administrar de 240 a 300 mililitros de agua para diluir el metanol en el estómago.
Al igual que el alcohol común, el metanol se descompone en el hígado. El metanol se descompone para producir formaldehído y ácido fórmico, que son responsables de muchos de los efectos tóxicos. El cuerpo tarda varios días en eliminar el metanol.
La exposición a corto plazo a los vapores de metanol puede irritar los ojos, la nariz y la garganta, y causar dolor de cabeza, náuseas, vómitos, mareos y dificultad para respirar. También pueden aparecer otros síntomas comunes de embriaguez, como mareos, euforia, visión borrosa y pupilas dilatadas. Los síntomas dependen del nivel y la duración de la exposición y pueden variar de una persona a otra.
Las exposiciones industriales a los vapores de metanol pueden causar la muerte o ceguera. Muchos incidentes reportados han involucrado trabajos en espacios confinados sin una ventilación adecuada o protección respiratoria. Afortunadamente, el aumento de la conciencia sobre los peligros del metanol, combinado con prácticas de trabajo más seguras, ha reducido el número de intoxicaciones graves en los últimos años.
La exposición a largo plazo al metanol se ha relacionado con dolores de cabeza, cambios de humor, irritación ocular y cutánea, problemas para dormir, problemas estomacales y deterioro visual. Exposiciones repetidas a corto plazo también pueden causar estos síntomas.
El metanol es un líquido inflamable y puede representar un serio riesgo de incendio. Arde con una llama azul pálida que generalmente no es visible a simple vista. Su punto de inflamación es de 12 ºC, por encima de esta temperatura se produce suficiente vapor para crear una mezcla inflamable con el aire. El vapor es más pesado que el aire y puede desplazarse por el suelo hasta una fuente de ignición distante y causar un retroceso. Los recipientes pueden explotar en el calor de un incendio. Aunque el metanol es normalmente estable, el contacto con agentes oxidantes fuertes aumenta el riesgo de incendio o explosión.
Protección contra el metanol
Use ropa protectora adecuada para protegerse contra el líquido de metanol o el vapor concentrado. Nunca sustituya la ropa de protección designada para trabajar con metanol, ya que puede disolver algunos materiales. Retire la ropa contaminada de inmediato y enjuague completamente las áreas de piel expuestas.
En algunas situaciones, es esencial utilizar ropa especial y respiradores. Estas situaciones incluyen trabajar en espacios confinados, algunas operaciones de mantenimiento y otros entornos de trabajo donde no es posible contar con una ventilación y controles de ingeniería efectivos.
Siempre use gafas de protección química a prueba de salpicaduras o una careta facial cuando haya riesgo de salpicaduras de líquido en los ojos.
La información anterior pretende ser útil como información general complementaria a los programas de salud y seguridad ocupacional existentes. No es adecuada como sustituto de un programa completo y adecuado.